Ante los periodistas, Núria Parlon ha expresado la posición del equipo de gobierno municipal que defiende el soterramiento de las líneas eléctricas que pasan por los barrios de Can Franquesa y Oliveras a partir de la construcción de la MAT (Muy Alta Tensión). Red Eléctrica no ha tenido en cuenta las alegaciones presentadas en su momento por el Ayuntamiento que pedían que la nueva MAT no pasara a menos de 150 metros de algunas viviendas de los barrios de Can Franquesa y Guinardera.
Además, el proyecto tiene un impacto negativo de carácter medioambiental en el Parque de la Serralada de Marina por el tipo de infraestructura que se quiere construir. Así pues, Núria Parlon ha anunciado las dos medidas administrativas que ya ha tomado el gobierno municipal. La primera, la presentación de un recurso al Tribunal Supremo donde se pide Red Eléctrica Española el parón de la construcción de la MAT y, segundo, si ésta no se hace subterránea, la alcaldesa ha pedido una entrevista con la Dirección General de Energía del Ministerio de Industria para tratar este tema. Parlon ha explicado que "entendemos que la infraestructura es necesaria para la ciudad y para el conjunto del Área Metropolitana, pero no puede entrar en contradicción con El interés general de la ciudad". A la vez, ha pedido un replanteamiento del proyecto para que cuente con el soterramiento, con el mayor consenso social y con un informe medioambiental que se ajuste a las necesidades de la Serralada de Marina.
Impacto medioambiental
Pasar una línea aérea de 220 * kv a una de 400 * kv -explica el recurso- provoca graves implicaciones medioambientales: la consolidación de un corredor eléctrico aéreo de alta tensión de entrada en el área metropolitana de Barcelona, aumento de los niveles de los campos electromagnéticos, la creación de nuevos tendidos, torres, pórticos, etc. La afectación medioambiental del trazado de las líneas existentes de 200 kv no es nula y tampoco lo será una vez convertidas a 400 kv. A esto hay que añadir los efectos acumulativos de los diferentes proyectos asociados a la llegada de los 400 kv en Barcelona por Santa Coloma de Gramenet y las líneas de alta tensión ya existentes en el municipio.
Al respecto, Núria Parlon ha remarcado que "esta ciudad no está en contra del progreso ni de los medios destinados a mejorar la calidad de vida de su vecindario, pero no se han tenido en cuenta los diversos requerimientos hechos por el Ayuntamiento a la manera como REE quiere sacar adelante el proyecto y no estamos de acuerdo, porque pone en peligro una zona verde importante para la ciudadanía y no se ha hecho un estudio ni del impacto ambiental ni de la repercusión que puede tener en la salud de las personas. Por todo ello, en Santa Coloma -ha dicho la alcaldesa- queremos la MAT soterrada ".
Apoyo de la ciudadanía
El Ayuntamiento de Santa Coloma informará a la ciudadanía sobre este recurso y le pedirá su implicación, en defensa del interés general, favoreciendo al mismo tiempo la creación de un colectivo que impulse una campaña que pida a REE que detenga los proyectos previstos y que estudie alternativas al paso de la MAT por la ciudad, con el consenso social e institucional.
De hecho, esta tarde está prevista una reunión con las asociaciones y entidades vecinales y agentes sociales de Can Franquesa y Oliveras para consensuar un primer manifiesto y poner en marcha una campaña de movilización social.