Más de 50 municipios de Catalunya -que suman el 50% de la población- apoyan el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares

Coincidiendo con el Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares, Alcaldes y FundiPau reivindican el papel de los municipios en la abolición nuclear.

La alcaldesa, Núria Parlon, interviene en el acto

59 localidades de Catalunya, así como la Diputación de Barcelona, ??han aprobado una moción en la que reconocen el peligro que suponen las armas nucleares hoy, se solidarizan con las personas y comunidades afectadas por su impacto y piden al Gobierno español que firme y ratifique el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN), aprobado en 2017 y que entró en vigor el 22 de enero de 2021.

El número de habitantes de las ciudades y pueblos que han aprobado la moción representa más de la mitad de la población de Catalunya, una cifra que demuestra el apoyo ciudadano a la abolición de las armas nucleares.

Hoy, en el marco de la conmemoración, el 26 de septiembre, del Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares, los Alcaldes en representación de la red de Alcaldes por la Paz, junto con FundiPau, han hecho público este apoyo y han animado a los ayuntamientos que aún no lo han hecho que debatan y aprueben la moción, reivindicando así el papel destacado de los municipios, de Cataluña, del Estado y de todo el mundo, para avanzar hacia la eliminación definitiva de las armas nucleares.

La alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlon; la alcaldesa de Calella, Montserrat Candini; el alcalde de Granollers, Josep Mayoral; y el director FundiPau, Jordi Armadans, han valorado hoy en Santa Coloma de Gramenet los avances de esta iniciativa municipalista conjunta.

El presidente de la red catalana de Alcaldes por la Paz y alcalde de Granollers, Josep Mayoral, ha querido lanzar un mensaje al gobierno del Estado: "Cuando los gobiernos callan, las ciudades tenemos la responsabilidad de actuar. Por ello, pedimos al Gobierno de España que firme y ratifique el tratado; se necesitan procesos con resultados palpables".

"El mundo local está al frente del desarrollo y sin Cultura de la Paz, no hay desarrollo", advirtió la alcaldesa, Núria Parlon. Desde la perspectiva de Santa Coloma, Núria Parlon ha explicado que "el Ayuntamiento trabaja en diferentes acciones de sensibilización ciudadana que incluyen un programa de actividades conjunto con los institutos para organizar, por ejemplo, visitas al campo de concentración como el de Buchenwald" pero remarcó que "si no tenemos conciencia ciudadana sobre la Paz estas campañas pierden fuerza".

El director de FundiPau, Jordi Armadans, ha insistido en la oportunidad que supone este Tratado, "Es un momento clave, que no podemos desaprovechar, para avanzar hacia el desarme nuclear. Nunca antes habíamos tenido un contexto como el actual, con un tratado de prohibición aprobado por las Naciones Unidas, firmado por 86 países y ratificado por 56, y en vigor desde el 22 de enero de 2021". Y añadió, "No tiene ninguna lógica invertir 72.000 millones de $ al año en el mantenimiento de unas armas de destrucción masiva que ponen en riesgo la vida y el planeta".

Por último, la alcaldesa de Calella, Montserrat Candini, ha reivindicado el papel de la memoria histórica en la promoción de la Cultura de la Paz, "tenemos la obligación moral, desde el mundo local, de mantener y difundir la memoria histórica, así como de crear un poso de valores colectivos a favor de la paz, para evitar errores del pasado. Calella ha hecho varias campañas de sensibilización como la identificación de los bombardeos sufridos por la ciudad durante la guerra civil o la campaña del Día Internacional de la Paz".

Las armas nucleares son un auténtico peligro para la seguridad de las personas, de los pueblos y del medio ambiente. Y las ciudades son, justamente, los objetivos principales de estas armas. Por eso la voz de las ciudades es imprescindible para avanzar hacia el desarme. Con las mociones, los municipios defienden el derecho de la ciudadanía a vivir en un mundo libre de esta amenaza. Cualquier uso de un arma nuclear, ya sea deliberado o accidental, tendría consecuencias catastróficas, de largo alcance y duraderas.

El Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares ya cuenta con el apoyo de 86 países que lo han firmado y 55 que lo han ratificado pero para que sea plenamente efectivo hay que conseguir que se sumen los países nucleares y los miembros de la OTAN. Y la presión de la ciudadanía es clave para conseguirlo.

Las mociones municipales se enmarcan en la iniciativa Ciudades de Paz, impulsada en Catalunya por la Red de Alcaldes de Alcaldesas por la Paz y FundiPau, en el marco de la campaña internacional Cities Appeal, de ICAN, que llama a los ayuntamientos a manifestar su apoyo al TPAN ya la abolición nuclear.
 
Municipios que han aprobado la moción

Aiguafreda, Alguaire, Barcelona, Begues, Calella, Canovelles, Castellar del Vallès, Castellbisbal, Castelldefels, Cervera, Cubelles, El Prat de Llobregat, Esplugues de Llobregat, Figueres, Gavà, Gelida, Girona, Granollers, Igualada, La Garriga, La Llagosta, Les Franqueses, Lleida, Lliçà d’Amunt, Lloret de Mar, Masllorenç, Molins de Rei, Mollet del Vallès, Montmeló, Morell, Olot, Palau d’Anglesola, Parets del Vallès, Prats de Lluçanès, Riudellots de la Selva, Sabadell, Sant Boi de Llobregat, Sant Carles de la Ràpita, Sant Cugat del Vallès, Sant Feliu de Codines, Sant Feliu de Llobregat, Sant Just Desvern, Sant Martí de Tous, Sant Sadurní d’Anoia, Santa Coloma de Gramenet, Santa Perpètua de Mogoda, Sitges, Tarragona, Terrassa, Tona, Ulldecona, Vallromanes, Viladecans, Vilafranca del Penedès, Vilanova del Vallès, Vilanova i la Geltrú, Vilassar de Dalt, així com la Diputació de Barcelona i el Consell Comarcal de l’Alt Empordà.