En el poblado ibérico Puig Castellar y con el título de “Las aportaciones ibéricas a la vida cotidiana”, se han organizado, por este domingo 2 de octubre, talleres para descubrir y experimentar con los adelantos tecnológicos y culturales que introdujeron los íberos en nuestro territorio: la metalurgia del hierro, el molino rotatorio y la escritura. Los talleres funcionarán de 11.00 a 14.00 horas.
También el domingo, habrá una visita guiada al yacimiento (12.00) para descubrir las innovaciones de los íberos en los ámbitos urbanístico, tecnológico y cultural. Se darán a conocer los hallazgos hechos en la última campaña de excavación del mes de julio, se entrará en la vivienda ibérica reconstruida y estará operativo el módulo interactivo instalado en el yacimiento.
No faltará una actividad tradicional de la Ruta Ibera el mismo día: “Los poblados de la Laietània se saludan”, una comunicación con espejos con otros yacimientos (13.00).
Finalmente, la organización propone a las personas interesadas en participar, vestirse de íberos y grabar un vídeo y publicarlo en Youtube (canal MarqueologiaCat). Las mejores caracterizaciones tendrán premio.
Muestra “el Cielo de los Íberos” en el Museo Torre Balldovina
En el Museo Torre Balldovina se puede visitar “El Cielo de los Ibers”, hasta el 2 de octubre, una exposición y un planetario que nos muestran como era el cielo hace miles de años y por qué ha cambiado; también nos presenta algunos de los fenómenos astronómicos que sucedieron en época ibérica.
Pueden ir el sábado 1 de octubre a las 11.30, 12.30, 18.30 y 19.30 y domingo 2 de octubre a las 11.30 y 12.30 h (las sesiones son de 1 hora). Las plazas son limitadas y las inscripciones se harán al día en el Museo 30 minutos antes de empezar la visita.
Poblado ibérico Puig Castellar: patrimonio cultural de ciudad
Desde la prehistoria hasta el nuestros días, Santa Coloma ha reunido un buen número de elementos patrimoniales, algunos de los cuales —como el poblado ibérico Puig Castellar, Torre Pallaresa o el recinto Torribera— tienen un interés que va mucho más allá de lo estrictamente local. Los importantes testigos históricos que se han conservado, los elementos patrimoniales que han sido objeto de restauración y las nuevas construcciones que se han añadido, conforman actualmente un patrimonio colomense bastante notable.
El poblado ibérico Puig Castellar es uno de los ejemplos destacados de este patrimonio cultural de Santa Coloma. Está situado a la cumbre del cerro del mismo nombre, conocido también como Turó del Pollo, dentro del Parque de la Cordillera de Marina.
El Puig Castellar pertenecía al pueblo de los layetanos y la cronología general del poblado alcanza de final del siglo V o principio del siglo IV aC hasta final del siglo III aC o a principio del siglo II aC, momento en qué es abandonado debido a los acontecimientos relacionados con la Segunda Guerra Púnica. Actualmente, el poblado tiene una gran extensión excavada que hace destacar la presencia de muros, y una posible muralla, conservados en una gran altura y de características auténticamente monumentales. Igualmente se puede ver la disposición de las construcciones formando una red urbanística en la cual se observan calles y los diferentes espacios de habitación, situados en varias terrazas que salvan el desnivel del terreno.
Las excavaciones que se han ido produciendo desde inicios del s. XX, por varias instituciones como el Ayuntamiento de Santa Coloma y la Universitat de Barcelona y diferentes personas, han permitido recuperar un gran número de objetos, algunos de los cuales nos indican los usos y las funciones de los espacios, y las actividades que se llevaban a cabo como por ejemplo el almacenamiento, el teñido ola molienda de grano o la metalurgia. Otros objetos nos demuestran la riqueza del yacimiento, como la colección de objetos metálicos encontrados, una de las más importantes que se conocen. Una buena parte de estas piezas se conservan al Museo Torre Balldovina.