Renaturalizar el río Besòs es una estrategia para aumentar su resiliencia frente a los impactos del cambio climático, e incluye liberar los ecosistemas de la presión humana para que tiendan a autorregularse y funcionar de forma natural.
Este cambio de paradigma pretende dejar que la naturaleza cuide de sí misma, permitiendo que los procesos naturales reparen y restauren los paisajes degradados por la acción del hombre.
El refugio de biodiversidad, como primer paso, abre una nueva etapa para preservar los hábitats existentes, potenciar la biodiversidad autóctona y eliminar a las especies invasoras.
El vicepresidente ejecutivo del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Antonio Balmón, el diputado de Acción Climática de la Diputación de Barcelona, Xesco Gomar, y la alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet, Núria Parlon, han presentado públicamente el inicio de las obras de este refugio de biodiversidad en el Paseo Salzereda de Santa Coloma.
Antonio Balmón ha afirmado que "no sólo nos quedaremos en la recuperación paisajística sino que estableceremos una agenda orientada hacia el futuro, basada en la sostenibilidad y el medio ambiente". "También se pretende dar al río una fuerza de proximidad a la ciudadanía para que la gente pueda ver cómo funciona este espacio natural", concluye.
El diputado de Acción Climática de la Diputación de Barcelona, ??Xesco Gomar, ha remarcado la importancia de acciones como la renaturalización del Besòs en la educación medioambiental “transformamos nuestras ciudades y educamos medioambientalmente a la ciudadanía con realidades, visualizando espacios como éste con la apuesta decidida de los ayuntamientos y administraciones. Con acciones como ésta luchamos contra la lacra del cambio climático”.
La alcaldesa, Núria Parlon, ha explicado que “tres administraciones públicas trabajan para que éste sea un entorno de salud y biodiversidad y sobre todo para recuperarlo para los usos ciudadanos, no sólo de la gente de Santa Coloma, porque viene gente de todas partes a disfrutar de ese espacio”.
Sobre la renaturalización ha añadido, “hemos recuperado este espacio pero nos quedaba una asignatura pendiente en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 30 que es apostar por su renaturalización. Lo haremos ahora con la construcción de un itinerario pedagógico que nos permitirá trabajar con las escuelas, las familias, con el conjunto de la ciudadanía; y con una laguna para estudiar la biodiversidad y realizar investigaciones científicas sobre la recuperación del río”.
El ámbito de actuación de esta Fase 1 de las obras comprende el espacio del cauce entre el Pont Vell y Can Zam. El proyecto tiene un presupuesto de un millón de euros financiado por el AMB (70%) y el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet (30%), y cuenta con la financiación europea FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional).
El nuevo refugio permitirá el desarrollo de flora y fauna y mejorará la calidad paisajística de una cuenca fluvial que se convierte en un corredor ecológico imprescindible dentro de la infraestructura verde-azul metropolitana, ya que conecta el Parque Natural de Collserola y la Sierra de Marina con el litoral metropolitano.
La Fase 1 del proyecto persigue cinco objetivos estratégicos:
- Mejorar la función de conector ecológico entre los parques naturales de la Cordillera de Marina y de la Sierra de Collserola.
- Mejorar las condiciones ambientales para el desarrollo de la población de la anguila europea (Anguilla anguilla) en peligro crítico de extinción.
- Recuperar hábitats lagunares desaparecidos para la mejora de las especies de peces y anfibios en el tramo final del Besòs.
- Reducir paulatinamente la presencia de especies de flora y fauna exóticas e invasoras, entre ellas la llamada caña americana Arundo donax.
- Poner en marcha de un espacio educativo para el desarrollo de actividades de divulgación y ciencia ciudadana.
Elementos principales de la Fase 1 del refugio de biodiversidad
El aula ambiental (explanada de recepción): Esta zona permitirá recibir a los grupos de visitantes (escuelas y familias), facilitar información detallada sobre la visita, y organizar el acceso a la laguna didáctica.
Camino didáctico: Recorrido educativo integrado en el ecosistema fluvial para facilitar la observación y el conocimiento de sus diferentes hábitats y especies garantizando la convivencia entre éstas y las personas visitantes.
Prado fluvial y acceso a la laguna didáctica: Se pretende conseguir un equilibrio entre el potencial de acogida de especies animales y la frecuentación controlada para la observación y el estudio.
Con el objetivo de maximizar el agua existente, se construirán canales estrechos sobre base de hormigón con aditivos biológicos que fomenten la aparición de algas y líquenes que, además de aportar complejidad ecológica, alcanzan una rápida integración paisajística.
Observatorio de aves:
Espacio destinado a la observación y estudio de las aves que nidifican y visitan las diferentes áreas del ecosistema fluvial.
Lagunas artificiales (reservas de biodiversidad acuícola):
Dos nuevas lagunas con acceso restringido destinadas a tareas de carácter científico o educativo, y potenciar las zonas de alimentación y reproducción de especies de aves, peces y anfibios.
Meandrificación del camino de servicio
Como estrategia para naturalizar la zona de refugio y crear nuevos microhábitats con vegetación fluvial para favorecer la presencia de polinizadores, lepidópteros, reptiles, anfibios y mamíferos.
Exposición itinerante
La ciudadanía puede conocer el proyecto de renaturalización del río Besòs mediante una exposición itinerante instalada en el Paseo de la Salzereda con Llorenç Serra, y que mediante paneles informativos explica la transformación del río y su entorno natural, con todos los detalles del nuevo refugio de biodiversidad.
Proyecto dentro del PSG (programa de actuaciones en paisajes naturales y urbanos)
Este proyecto forma parte del PSG (programa de actuaciones en paisajes naturales y urbanos). Se trata de un plan de inversiones que pretende mejorar los espacios fluviales metropolitanos, recuperar las zonas degradadas e integrar distintos elementos naturales del territorio metropolitano que presentan una fragmentación. De esta forma, el AMB va consolidando la infraestructura verde metropolitana: un conjunto de espacios naturales interconectados que ocupan más de 50% de la superficie de la metrópolis Barcelona y tienen funciones vitales por la calidad ambiental y la cohesión social de este territorio.