El 1 de julio se inicia el periodo de rebajas de verano que se alargará hasta el 31 de agosto. La bajada de precios de estas semanas es una oportunidad para acceder a productos y servicios que tal vez, en temporada, estaban fuera de nuestro alcance.
Los próximos días, el Departamento de Comercio, Disciplina de Mercado y Ferias llevará a cabo una campaña en los comercios en relación con las normas que hay que tener en cuenta durante las rebajas. Las personas consumidoras sólo tienen que seguir unas pautas muy sencillas:
- Intentar encontrar lo que se quiere comprar en los comercios más cercanos.
- Hacer una lista de lo que interesa, de acuerdo con nuestro presupuesto.
- Comparar precios. El rebajado debe constar siempre al lado del no rebajado.
- Examinar el producto. Debe tener la misma calidad y garantía.
- Diferenciar entre ventas de rebajas y ventas de liquidación, saldos y ofertas.
- No comprar compulsivamente. Leer detenidamente las etiquetas, las instrucciones de uso de los productos.
- Pedir y conservar el ticket de compra. Es la garantía.
- Conservar los catálogos comerciales y la publicidad. En son vinculantes.
- Comprobar que no haya taras o defectos. El establecimiento no tiene la obligación de cambiar un producto que se encuentre en perfecto estado, salvo que lo anuncie.
- Recordar que los comercios disponen de hojas oficiales de reclamación o denuncia.