Durante este verano, los fuertes calores han acelerado el envejecimiento y el mal estado fitosanitario de estos árboles y después de evaluar todos los ejemplares se ha decidido talar 11 unidades que tienen casi la totalidad del ramaje muerte y seco y troncos con afectaciones.
El chopo es un árbol de madera muy astillosa y blanda, con tendencia a hacer cavidades y tumoraciones que facilitan el posterior ataque por hongos. Este hecho debilita su estructura y hace peligrar su estabilidad.
Durante un tiempo se evaluará el comportamiento del resto de los árboles antes de plantar otra especie.