Mejoras en el alumbrado público

Desde junio a diciembre de 2019, el Ayuntamiento ha sustituido 574 luminarias. La inversión total ha sido de 259.000 €. Las actuaciones han consistido en la sustitución de luminarias antiguas que generan contaminación lumínica e ineficientes, por luminarias que incorporan tecnología LED, mucho más sostenibles y respetuosas con el medio natural. Todas las luminarias incorporan dispositivos de control para optimizar el consumo energético.

Alumbrado renovado en la calle Milton, en el distrito III

Aprovechando los soportes existentes, se han diseñado una iluminación que genera más sensación lumínica, no aportando más luz si no iluminando mejor, aprovechando las posibilidades que dan las nuevas fuentes de luz para repartir de forma más óptima, y obtener una mayor uniformidad. Este alumbrado, además de incorporar criterios de eficiencia energética, gestión inteligente y salud y calidad ambiental, incorpora criterios de igualdad de género, generando espacios nocturnos con una mejor uniformidad lumínica y IRC (índice de reproducción cromática, capacidad de la luz artificial de reproducir los colores con respecto a la luz natural), obteniendo como resultado espacios públicos más seguras y con un mayor confort visuales para poder desarrollar actividades nocturnas. 

La distribución por distritos de estas nuevas 574 luminarias es la siguiente: en el distrito 1, 76; al 2, 28; al 3, 239; al 4, 117; al 5, 30; y finalmente el 6 le corresponden, 84.

El alumbrado en Santa Coloma

Santa Coloma de Gramenet, con una población de unos 120.000 habitantes y unos 7,1 km2, tiene unos 120 puntos de conexión con las compañías eléctricas para la atención del servicio de alumbrado exterior y un total aproximado de 9.000 puntos de luz (lámparas) que funcionan 4.300 horas /año.

Las instalaciones de alumbrado público forman parte de las infraestructuras básicas de una ciudad y deben tener una vida media entre 20 y 25 años. Su renovación va ligada a la regeneración urbanística de la ciudad, transformación que se hace de forma continua y gradual en el tiempo.

Es un servicio esencial para la ciudadanía y consiste en la iluminación del espacio público con el objetivo de proporcionar la máxima visibilidad para el normal funcionamiento de las actividades nocturnas. Asimismo debe garantizar la seguridad y confort ciudadano. Este servicio se debe hacer con la máxima eficacia y eficiencia posible, siendo respetuoso con el Medio Natural que le rodea. Requiere tener en cuenta disposiciones de carácter técnico, normativo y legal, para garantizar sus prestaciones y seguridad.

La tecnología LED

LED es el acrónimo de Luminiscence Emiting Diode (diodo emisor de luz). Es un semiconductor que aplicándole una tensión eléctrica y en determinadas condiciones emite luz. Se trata de un componente electrónico que permite un control muy cuidadoso. Actualmente, este tipo de tecnología para obtener luz a partir de la electricidad, es la más utilizada para reformas y nuevas urbanizaciones en el alumbrado exterior, debido a su alta eficiencia, fiabilidad y durabilidad.

Esta inversión ha supuesto que 574 luminarias se hayan sustituido por nuevas que incorporan tecnología LED. Al ser más eficientes que las anteriores supondrá una reducción del consumo energético, respecto a las anteriores, en más de un 50%. El cambio a LED supone más fiabilidad del servicio de alumbrado reduciendo significativamente el número de incidencias.

Criterios de renovación y nuevas urbanizaciones

Los criterios de renovación del alumbrado y nuevas urbanizaciones del espacio público que se han establecido desde el departamento de alumbrado público, tienen en cuenta el cumplimiento de los requerimientos legales de iluminación • iluminación de las calles que indica la normativa de alumbrado exterior, en función del tráfico, tanto de vehículos como de personas. Como requisito adicional se han establecido niveles específicos para las aceras, no de obligado cumplimiento con la normativa vigente, para aumentar la seguridad ciudadana y establecer un mayor confort visual para el peatón, haciendo la ciudad más agradable para el desarrollo de las actividades cuando oscurece.

A grandes rasgos, se ha establecido como norma general, para reformas y nuevas urbanizaciones que se vayan haciendo a lo largo del tiempo, una tipología de luz blanca cálida para toda la ciudad y con una alta eficiencia energética, exceptuando las zonas más cercanas a la Sierra de Marina y el cauce del Río Besòs, en que se ha establecido un tipo de luz un poco menos eficiente, pero más respetuosa con la actividad nocturna de los seres vivos que habitan estos parques naturales tan importantes para nuestro municipio.