El Pleno del Ayuntamiento de Santa Paloma ha aprobado, de forma inicial, la modificación de la Ordenanza de Vía Pública dónde se establece la prohibición de beber y vender bebidas alcohólicas en la vía pública en dos supuestos. Estos son:
- Cuando se puedan causar molestias a las personas que utilizan el espacio público y a los vecinos.
- Cuando se pueda alterar gravemente la convivencia ciudadana y especialmente cuando concurran las circunstancias siguientes: cuando el consumo se pueda hacer de forma masiva por grupos de ciudadanos o invite a la aglomeración en parques, plazas y otros lugares públicos; cuando se pueda deteriorar la tranquilidad del entorno o provocar situaciones de insalubridad; cuando el consumo se exteriorice de forma denigrante para el resto de ciudadanos de la vía pública; cuando los lugares dónde se consuma accedan menores de edad.
Así, según la modificación de la Ordenanza, sólo estará permitido el consumo de bebidas alcohólicas cuando este se produzca en establecimientos y otros espacios reservados expresamente para aquella finalidad, como terrazas y veladores, así como cuando en casos puntuales el consumo en la vía pública cuente con la oportuna autorización municipal.
El Ayuntamiento sancionará, de manera especial, la venta de bebidas alcohólicas cuando esta se produzca sin la autorización municipal específica. Por lo tanto, se prohíbe la compra o adquisición en el espacio público de bebidas alcohólicas procedentes de la venta ambulante no autorizada.
Con esta modificación, el Ayuntamiento quiere hacer un ejercicio de responsabilidad hacia la preservación de la salud de sus ciudadanos, especialmente de jóvenes y adultos, y en beneficio de la convivencia y el civismo necesarios. La modificación entrará en vigor a partir del 1 de agosto de 2009.
Sanciones de 90 a 120 euros
Esta reforma de la Ordenanza recoge también las oportunas sanciones a los infractores. Estas irán desde una amonestación por parte de la Policía Local, hasta sanciones que irán de los 90 a los 120 euros. Por otra parte, la venta ambulante estará penalizada con 500 euros.